Los chicos de la calle

Chicos de la Calle
Chicos de la Calle

Hace muchos años que este fenómeno social, se ha instalado en nuestra sociedad.

La violencia cada vez en aumento, se apropia de sus vidas. Son los chicos que deambulan por las calles, sin hogar, sin techo que viven constantemente al acecho, marginales que no puede esperar nada. Solo el silencio y quizá una mano piadosa o algo mágico que toque sus vidas.

Cada uno sabe la dimensión de su propio sufrimiento o de la ausencia total de su sentido de su vida. Chicos que roban y matan si piedad. Niños, adolescentes sin rumbo, sin mañana, perdidos en la multitud. No existen para ellos los limites porque nunca los tuvieron, y esta ausencia de limites los lleva, a vivir situaciones limites: la delincuencia. Solos vagan por la vida. La calle es su única escuela, la del delito.

Un niño de diez años que roba y que mata, vivió seguramente en un ambiente tan amenazante, donde solo se le enseño a tener esas conductas. Sabemos que los niños y los adolescentes repiten los modelos de sus adultos. Pues estos niños carecen de los mismos.

Se necesitaría una gran reforma social, espiritual para poder ayudarlos, y lo que es aun más importante poder brindarles un lugar de contención afectiva, ya que el afecto es la gran carencia de la que «gozan».

Dejo a ustedes, lectores, la puerta abierta para que juntos reflexionemos.


Fuente: Silvia Perlman, Diario Legitima Defensa nº10, página 15. Impreso en la Ciudad de Buenos Aires en mayo de 1999.